- Este tiempo de recuperación después de un sismo podría reducirse si el Estado impulsase la rehabilitación de edificaciones teniendo en cuenta los avances tecnológicos.
- Una solución adecuada para la rehabilitación de estructuras históricas, edificios esenciales y viviendas es el aislamiento sísmico.
- El costo total de la carencia de políticas de prevención es mayor a la cantidad de dinero que puede ser utilizado en la adecuada modernización sísmica.
Tomando en cuenta la vulnerabilidad estructural, la reconstrucción de una ciudad como Lima luego de un posible sismo de alta intensidad podría tomar de 10 años a más.
En ese sentido, Enrique Simbort, Director de la Escuela Profesional de Ingeniería Civil de la Universidad Católica San Pablo de Arequipa, indicó que este tiempo podría reducirse si el Estado impulsase la rehabilitación de edificaciones teniendo en cuenta los avances tecnológicos.
Una solución adecuada para la rehabilitación de estructuras históricas, edificios esenciales y viviendas es el aislamiento sísmico, cuyo objetivo es proteger la vida a través de la reducción de las acciones sísmicas, evitando así un daño significativo de la estructura y sus contenidos.
“Actualmente, en el Perú la vulnerabilidad de las construcciones es tal que más de la mitad de las edificaciones, incluyendo inmuebles estratégicos y públicos, son incapaces de soportar los movimientos telúricos a los que pueden ser sometidos”, señaló Enrique Simbort.
De acuerdo al especialista, el costo total de carencia de políticas de prevención estructural es mayor a la cantidad total de dinero que puede ser utilizado en la adecuada modernización sísmica de las construcciones existentes. Existe cierta falta de conciencia, tanto a nivel institucional y social.
“Cuando se produce un sismo fuerte, el gobierno de turno se limita a gestionar la emergencia, pero no invierte en prevención. Así, el riesgo sísmico se olvida rápidamente”, señaló.
Finalmente, Enrique Simbort recomendó al Estado realizar una mayor inversión en el desarrollo de investigaciones vinculadas al campo de la ingeniería sismorresistente e impulsar un cambio de mentalidad en la formación académica respectiva.
“Debemos evitar la autoconstrucción en el país, y fomentar que la población tenga una mayor apertura a la aplicación de técnicas modernas”, precisó el Director de la Escuela Profesional de Ingeniería Civil de la Universidad Católica San Pablo de Arequipa.
Cabe precisar que Enrique Simbort es especialista en Ingeniería Sismorresistente y viene liderando en la Universidad Católica San Pablo un grupo dedicado a la investigación en ingeniería sismorresistente y reforzamiento de estructuras del patrimonio cultural en Arequipa.
