Durante el verano las posibilidades de deshidratarse son mayores y más aún si somos deportistas pues nuestro cuerpo se expone a la pérdida de agua y minerales a través del sudor, es por esto que el Club médico deportivo Bodytech explica cuáles son las consecuencias de esto y cómo afrontarlas.
Somnolencia, cansancio, bajo rendimiento mental y físico, son algunas de las consecuencias de estar deshidratado o mal hidratado. Pero, ¿cómo sabemos que estamos deshidratados? Es cuando aparece la sed, si la boca comienza a estar un poco seca es porque necesitamos agua, debemos sin necesidad de sentir sed.
Además para un deportista la hidratación es fundamental pues el músculo está compuesto por 75% de agua y si no la consumes no habrá un adecuado desempeño durante el entrenamiento.
Agua es vida
Debemos recordar que el agua tiene funciones vitales en el cuerpo, es el que se encarga de regular la temperatura, está en todo el proceso de la digestión, incluso se necesita agua para exhalar. Si no tenemos lo suficiente comienza la deshidratación que entorpece todas estas funciones. El cuerpo requiere de agua para casi todos los trabajos que realiza, No hay que ser deportista para tomar agua, debemos hidratarnos correctamente.
Recomendación
Es por esto que se recomienda tomar entre 2 y 2,5 litros de agua diariamente, que es un poco más de los clásicos 8 vasos de agua. Además si estamos realizando una actividad física necesitamos reponernos para continuar con el ejercicio, debemos buscar una bebida que no sea demasiado azucarada, pues el azúcar también puede hacer que perdamos más agua. El mejor hidratante es el agua pura.
Sin embargo, en la actualidad existen las bebidas energizantes que Bebidas energizantes que por lo general tienen concentraciones importantes de cafeína, que es un diurético, casi lo que podríamos tomar en 4 ó 5 tazas.
